***contiene spoilers***
Como suele suceder con los musicales, fui a ver esta película con las expectativas bastante bajas. Y sin embargo me gustó. Harto.
Típicamente, uno de los típicos puntos débiles de los musicales es justamente la música. Esas canciones "estilo Broadway" formalmente correctas pero en el fondo fomes y olvidables. Aquí, te sabes todas las canciones desde antes. Y la música es muy buena! (Ya sea que los grandes éxitos de Abba te gusten de verdad o como "placer culpable").
Creo que todos los musicales debieran ser con música probada. De hecho, Quentin Tarantino dijo por ahí que jamás contrataría un músico para hacer una banda sonora, porque puede salir con cualquier porquería, siendo que está lleno de música genial que se puede elegir en forma exacta para cada escena. Yo estoy de acuerdo y creo que esta película apoya la teoría.
Sobre la historia misma, lo que al principio amenaza ser una historia de amor adolescente (que horror!) termina siendo una especie de cuento de hadas sobre el Príncipe (Princesa)azul, donde verdadera la protagonista es la Madre (representada por Meryl Streep. Aunque en general no soy capaz de distinguir entre una actuación razonable y una genial, debo decir que Meryl Streep se pasa para actuar bien. Logra trasmitir toda una gama de sentimientos y hasta emocionarte, lo que no deja de ser un gran logro considerando que se trata de un musical con una historia bien simplecita.
Un 8/10.
